Las enseñanzas de Catalina Middleton y el Príncipe William

La boda del Príncipe William y Catalina Middleton no sólo mostraron que en pleno siglo XXI se puede tener un cuento de hadas, sino que éste puede generar millones de euros y que se puede mediatizar de la mejor manera.

Para la mayoría  de  mortales contraer matrimonio representa un gasto, pero para quienes pueden capitalizar su imagen, casarse se convierte en un gran negocio, que en ciertos casos, incluso puede mejorar la economía de un país.

Aunque suene difícil de creer que la unión matrimonial puede tener repercusiones nacionales, en realidad es así, como claro ejemplo tenemos el caso de la reciente boda del Príncipe Guillermo y Catalina Middleton

De acuerdo con el diario español El Mundo[1], la boda real generó 120 millones de euros en Londres, pues atrajo a más de 600 mil turistas. Eso sí, el coste del enlace real fue de alrededor 23 millones de euros para las arcas inglesas.

Si hacemos cuentas, fueron  alrededor de 97 millones los que hubo de ganancia, gracias al turismo y a la venta de souvenirs reales.

Pero entonces la gran pregunta es ¿Cómo hago que mi boda deje tanto dinero?

La respuesta en este caso es muy sencilla y muy poco práctica para la mayoría de las personas: cásate con el Príncipe que todo mundo desea y que además es hijo de la difunta Lady Di.

Bueno, en realidad sí hay varias maneras para capitalizar una boda, si eres una figura pública, pero es un tema que me gustaría tratar más adelante en otro artículo, pues requiere profundizar en él.

Del caso de la boda del Príncipe Guillermo y Catalina hay dos factores muy importantes de los que se debe aprender y quiero abordar:  el trato que se le dio a la prensa y el uso de las redes sociales.

Para la boda real el uso de facebook fue una herramienta que acercó a cualquiera, que tuviera una conexión a internet en cualquier parte del mundo y que estuviera interesado en saber más sobre los príncipes.

Antes de la boda la página oficial The British Monarchy -www.facebook.com/TheBritishMonarchy) -

(aquí hay que reconocer lo vanguardista que es la monaquía inglesa al utilizar facebook) se centró en mostrar las actividades de, en ese entonces,  los futuros novios.

Vimos a la pareja las actividades que hacían antes de la boda, a quiénes visitaban o a qué evento social asistían, nótese que el uso de facebook no se concentró en la boda hasta ese día, aquí el objetivo principal de esta página siguió siendo promocionar a todos los integrantes de la monarquía, como lo tenía desde su lanzamiento. Claro está con un importante enfoque a Catalina y William.

Además, para hablar específicamente de la unión matrimonial se recurrió más a Twitter, pues por  ahí se daban algunos detalles de la boda real.

Aunque como medio principal para promocionar  el enlace, se tuvo a  la prensa.

Aquí hay que resaltar que el trato que se le dio a los medios de comunicación fue impresionante, algo que cualquier empresa de Relaciones Públicas tiene que aprender.

En cuanto los medios de comunicación empezaba con algún cuestionamiento sobre la boda, la  Casa Real lanzaba un boletín en el que aclaraba las dudas, respetando la privacidad de los novios, sin dejarlos mal parados.

Un ejemplo de esto, fue cuándo cobraron fuerza las especulaciones de quiénes estaban invitados  a la boda. La Casa Real tuvo a bien contestar con un boletín que aclaró quienes asistirían, e incluso aclaró cómo serían las actividades del día del enlace. Es decir, no sólo se le dio a la prensa lo que quería, sino hasta más.

Después de esto, podemos recapitular que hay tres puntos que se deben de tener en cuenta y que en cualquier empresa de medios se pueden utilizar

1.- No canibalices tus canales de comunicación, se debe de tener claro para qué sirve cada cuál y respetarlo en todo momento.

2.- Aunque las redes sociales permitan llegar directamente a la audiencia o al consumidor, no hay que menospreciar a la prensa, sigue siendo un generador de opinión importante. Además cabe señalar que si lo que se publica es lo que uno desea, se convierte en un validador de lo que pregonamos.

3.- Como relacionista público de cualquier, CUALQUIER empresa, producto o personalidad no puedes tener como única prioridad a quien representas, la prensa también es fundamental. Un gran error actual en las Relaciones Públicas es que se cree que el cliente debe ser protegido en todo momento y que si los medios desean cierta información que éste no desea dar, se debe ignorar a la prensa.

La labor de un buen relacionista  es buscar ese punto medio en el que el cliente y la prensa queden satisfechos, debe aprender a negociar con ambos.

Fotografía: Grupo Oficial de facebook “Prince William and Kate”